Ultrahidratante Redensificante

“Sérum ultrahidratante redensificante”, epítetos siniestros e ininteligibles para describir un producto que a los efectos es como si arrastrases un tocino templado por tu cara. ¿Quién empezó con esta mierda de adjetivos calificativos sonrojantes y charcuterescos? Sacan lo más clasista de mi ser instándome a utilizar la figura del charcutero como el epítome del homus barrius. Como si alguien que lonchea chopped no pudiera ser glamouroso o bien se le escapase el concepto técnico de un cosmético excretor que hace mucho menos por ti que beberte un vaso de agua del grifo. Como si tuvieras que explicárselo con términos crípticos, ambiguos y ridículos que lo dejasen perplejo y sin capacidad para generar interrogantes. “Vivimos en un mundo cínico”, que decía Tom Cruise al final de Jerry Maguire. Siempre me lo repito en momentos de espeluzne respecto a chorradas de fondo cotidiano como esta muestra de sérum en perlitas horteruzas que te regalan en una droguería por comprar una colonia. Y me imagino a Tom diciéndolo y retumbando en mi mente: Tom con la voz de Jordi Brau, que es la misma voz de Tom Hanks, de Kenneth Branagh, de Sean Penn ¡y de Roberto Benigni! (Cacao maravillao de referencias en nuestra educación sentimental; Frankenstein imposible) Pero modulada distinto, modulada como si fuera el miembro más paradigmático de la Cienciología: “Vivimos en un mundo cínico”. Qué ironía, amigo. Lo peor de todo es que me ha salido un granazo con el sérum, luego la publicidad no mentía, ahora mi piel tiene mayor densidad (de sebo). ¡Gracias gratuidad!